Puentes, no muros

Puentes, no muros

La tarea de un entrenador personal debe ser muy fácil: fungir como puente para llevarte del punto a al punto b. Nada más, nada menos. Es algo importante de aclarar, puesto que a un porcentaje alto de <<personal trainers>> les fascina dictar la meta de las personas. Pareciera ser la regla y no la excepción escuchar cosas como las siguientes en el gimnasio:

“Tomar clases de zumba no es bueno, mejor haz cardio en la caminadora por una hora”.

“Debes entrenar también tus brazos. Que no te de miedo verte varonil”.

Lo importante es: si te gustan las clases de zumba, nada debe impedirte tomarlas, y si no quieres tener brazos desarrollados ninguna necesidad tienes de estimularlos. Un entrenador puede darte una breve explicación sobre los beneficios que hay en otras actividades que no sean las clases grupales, o hablarte sobre lo remoto que es desarrollar brazos varoniles, pero hasta ahí. Tú decides el uso que le das a la información recibida; decides las metas que se alinean con tus prioridades y valores.

Recuerda, los entrenadores podemos ser expertos en sistemas de entrenamiento, pero tú eres expertx en tu vida. Llévala a donde siempre has querido.